Serie Eclipse Bay, Jayne Ann Krentz (cri)

Los Maddison y los Harte llevan 2 generaciones odiándose. Todo comenzó con los abuelos, después de luchar juntos en una guerra que ya nadie recuerda, montaron una empresa con la que ganaron mucho dinero, pero se metió por medio una mujer que los estafó a ambos dejándolos arruinados. A raíz de esto el uno le echó la culpa a el otro y viceversa y ahí comenzó el odio entre ambas familias, odio que por supuesto inculcaron a sus hijos y a sus nietos.
El primer libro relata la historia entre Rafe Maddison y Hannah Harte, nietos ambos de los primeros Maddison y Harte.
Rafe es el chico malo, interesante, peligroso, pasional y motero de Eclipse Bay, todo aquel que lo conoce da por hecho que tarde o temprano acabará con sus huesos en la cárcel. En su familia los matrimonios siempre han sido un fracaso, prueba de ello son los cuatro divorcios de su abuelo, por esto tanto Rafe como su hermano no creen en el matrimonio. Rafe tiene una “relación” con Kaitlin una chica ligera de cascos que tiene muy claro lo que quiere, irse del pueblo y triunfar, no poniendo reparos en acostarse con cualquiera para conseguir su fin. A Rafe esto no le agrada y una noche pone fin a su relación, Kaitlin enfadada le deja tirado en medio de la nada.
Por su parte Hannah es una chica buena, estudiosa, racional, lógica y responsable que sabe muy bien a lo que aspira en la vida, desde luego no es a encontrarse de noche con Rafe en un lugar solitario. Aunque esto es lo que realmente ocurre después de que tenga una cita desastrosa con Perry un trepa que lo único que busca es comprometerla para así casarse con ella y aprovecharse del prestigio de su familia.
Y así abandonados se encuentran los dos en el mismo lugar y el mismo día. Esa misma noche aparece muerta Kaitlin, y gracias a que Rafe y Hannah estaban juntos no acusan a éste de haberla matado.
Después de esta noche cada uno sigue su camino y su vida, hasta que pasados 8 años fallece Isabel, la tía de Hannah y les deja su casa Dreamscape a ambos. La tía siempre ha pensado que Rafe y Hannah harían una buena pareja y que serían capaces de superar el odio de sus familias, para ello a lo largo de los años les ha ido inculcando a ambos la idea de que su casa sería ideal para montar una posada-restaurante. Con esta idea llegan ambos a Eclipse Bay, Rafe con la idea de asociarse con Hannah en todos los aspectos para montar el negocio, y ella con la idea de comprarle su parte y montarlo ella sola.
Con la vuelta de ambos, el pueblo es un hervidero de chismes y es inevitable que se vuelva a hablar de la misteriosa muerte de Kaitlin. Por situaciones y comentarios tanto Rafe como Hannah sospechan que Kaitlin murió asesinada y que su asesino sigue suelto y continúa en el pueblo, por supuesto no dudan en investigar poniendo en peligro sus vidas.
El libro me ha encantado sobre todo el personaje de Rafe, un chico malo que se ha hecho a si mismo que tiene muy claro lo que quiere y lo que tiene que hacer para conseguirlo, además tiene un sentido del humor algo cínico que en más de una ocasión me ha hecho soltar una sonrisa.
Por su parte Hannah lucha contra lo imposible, no caer seducida por Rafe, algo imposible ya que desde hace años ha caído bajo su embrujo.
Personajes secundarios hay muchos, pero yo destacaría al abuelo de Rafe, Mitchell Maddison. Un personaje que a pesar de parecer un viejo cascarrabias y de todos los divorcios que lleva a sus espaldas, todavía cree en el amor.