VIAJE DE VERANO

BB escribió:el turismo gastronómico siempre es una opción

Oh, sí, lo es. Doy fe.

Niñas, no me hagáis eso, que sabéis que soy un despiste andante, y no sabía de qué enlace hablábais, hasta que, por fin, ¡suerte! lo he visto. Qué fotografías tan bonitas, Anabelee.

Ya me he tomado nota del blog de Massimo, para dare una occhiata (ya no recuerdo si se dice así: ne ho tutto dimenticato! )

¿Ya no hay más historias?

Síííí...
es que he estado liada con un temita familiar y no he podido subir más fotos. A ver si hoy me dejan

Creta es como ... España hace treinta años, dijo mi chico a poco de haber aterrizado allí.
Es mucho más auténtica que sitios como Santorini o Mikonos, pero hay que convivir con lo que eso implica. Las carreteras de la isla son malas y estrechas, llenas de baches. Alquilamos un coche pequeño, y nos dieron un Hyunday Atos destartalado que debía tener diez años... pero es que todos los coches que vimos en la isla estaban en un estado lamentable. Mucho peor de lo que recordaba en Malta, por ejemplo, donde tampoco se conduce demasiado bien

Y como dice el refrán, donde fueres haz lo que vieres, ya nos veis metiéndonos en el arcén para dejar que te adelante un loco, y haciendo cosas que en España no haríamos. Pero lo pasamos pipa con el cochecito de marras y no nos dejó tirados ningún día.
Es una isla bastante más grande de lo que parece en el mapa, y como las comunicaciones no son buenas, cuesta más llegar a los sitios de lo que una podría calcular viendo la ruta sobre el papel. Tuvimos que descartar Samaria, con mucho dolor de mi corazón por falta de días.

Podría decir que hay dos Cretas: una es la turística, la de las playas, costa y sus ciudades "venecianas"; y otra es el interior agreste. Es muy árida, y si tuviera que describirla con pocas palabras diría que Creta son olivos y cigarras. Nos acompañaron todo el viaje, constantemente.
De las playas poco puedo decir, no soy especialmente adicta a ellas. Me quedo con Elafonisi, por su arena fina y porque a pesar del gentío me hizo sentirme más desahogada que en otras que estaban a tope.
De las ciudades, siempre se destacan Hania y Rethymno (incluso allí, en sus carteles, lo escriben de formas distintas al transcribirlo del griego, así que espero que me perdonéis si se me escapa alguna letra). Me quedo con Rethymno, tiene un paseo junto al mar que me encantó y sus calles interiores tienen mucho encanto, aunque las dos ciudades se parecen bastante. El puerto de Hania es magnífico, pequeño pero lleno de locales y de colorido. No hay nada mejor que tomarse un frappé sentados en una terraza, observando el ir y venir de los barcos.
Si alguna vez vais, mi recomendación es que os alojeis en o cerca de estas ciudades, de cualquiera de ellas, porque al ser malas las carreteras, no siempre apetece coger el coche de noche para ir hasta ellas, y merecen más que una visita de un día, como tuve que hacer yo.
Parece mentira en una chica de costa, pero me quedo con la Creta interior. La isla es montañosa, y las villas están en lugares elevados a los que llegas por carreteras llenas de eses.
Apunte: en todas las carreteras hay una especie de capillitas (como iglesias diminutas). Son recordatorios que pone la gente, de los accidentes mortales que sucedieron en la carretera. Te encoge el corazón ver de repente varias de esas capillitas a la salida de una curva. Dentro tenían fotografías de los difuntos, y velas y flores.
Las villas son blancas, y como en el sur en España, la gente hace vida fuera. Les ves siempre sentados en el exterior, a la sombra, mirando con curiosidad a los turistas. Muchas mujeres visten de negro, al estilo tradicional, y generalmente les hace gracia que algún turista quiera fotografiarlas. Son muy campechanas.
El primer día que nos asomamos al interior de la isla, veníamos de la playa. No iba preparada para entrar en una iglesia, llevaba pantalones cortos y una camiseta de tiras (en todas partes te dicen lo de cubrir los hombros y bla-bla-bla; aunque hace tiempo que hemos descubierto que son más estrictos en las ciudades que en los pueblos). Nos habíamos detenido en Anogia para tomar un café y dar un paseo por el pueblo. Bru me dijo, desde la puerta, que tenía que ver la iglesia por dentro (la típica ortodoxa, toda pintada y con dorados). Llevaba la cámara al cuello. Había una señora de unos sesenta años dentro, y yo asomé la cabecita. Le pregunté en italiano si podía pasar, y ella le preguntó al sacerdote, que dijo que sí, y añadió algo que no entendí. Luego supe que era que iba a cerrar y me diese prisa Pregunté si podía tomar fotos, y la señora se puso a bromear conmigo en un inglés macarrónico porque había entendido que quería sacarla a ella, y no entendía para qué querría yo una foto de una abuela... Nos reímos las dos, e incluso entretuvo un momento al cura para que no me apagara las luces mientras yo sacaba fotos.
Estuvimos hablando con el sacerdote de arte. No conocía España, pensaba que éramos italianos porque yo me dirigí a la mujer en ese idioma (aún no había cambiado el chip); pero le gustó nuestro interés y nos recomendó algunos sitios cerca de Rávena. Ahí estaba él, con su barba y sus ropajes ortodoxos, y no le importaba un pito que la otra chica o yo lleváramos shorts siempre que fuésemos respetuosos.
La iglesia era muy bonita, la clásica iglesia que sale en todas las fotografías de Grecia, blanca y azul por fuera. Todo el color está dentro, en sus pinturas.

(luego os cuento de Knossos )

¡¡¡Menos mal que se te ocurrió preguntar Zen!!!
Bonito relato y con muchas cosas que apuntar, como lo del frappé, muy importante.
En el relato que has hecho me he hecho una imagen mezclada con anuncios y pelis, y he tenido la sensación de estar allá, con vosotros.
Lo del coche es gracioso, pero es muy cierto, que cuanto más viejos más duran. Supongo que por eso han llegado a viejos y más en carreteras tan duras. Otro buen consejo al que tener en cuenta.

Pues ahora a esperar las fotos, a ver si he acertado con lo que he imaginado.

Muy bueno. Me ha pasado como a Harry: también tenía la sensación de estar allí. A lo mejor estaba, en cada gato que habéis visto  

Esperamos fotos ¡y Knossos!

zen escribió:Muy bueno. Me ha pasado como a Harry: también tenía la sensación de estar allí. A lo mejor estaba, en cada gato que habéis visto  

Esperamos fotos ¡y Knossos!

¿has dicho gatos? Creta es el paraíso de los gatos